martes, 6 de junio de 2006

Editorial



"[...] La boruca que venía de allá abajo se salía a cada rato de la barranca y nos sacudía el cuerpo para que no nos durmiéramos. Y aunque queríamos oír parando bien la oreja, sólo nos llegaba la boruca: un remolino de murmullos, como si se estuviera oyendo de muy lejos el rumor que hacen las carretas al pasar por un callejón pedregoso..."
"El llano en llamas", Juan Rulfo

La boruca es el grito de guerra final que lanzan los hombres cuando ya no hay más tiempo, cuando el enfrentamiento es inminente, cuando el miedo se apodera de sus cuerpos, cuando saben que la guerra es actual, real. Y es éste grito, la boruca, la que exhala el miedo e inhala valor. Una palabra muy mexicana que fascinaba a Rulfo. Y es precisamente con este grito que, los diriguimos éste proyecto editorial, nos sentimos identificados. Boruca nace en octubre de 2005 con la esperanza de contribuir, sin vanidad, a la formación con información de jóvenes universitarios --que como nosotros-- tenemos ideas, emociones, ambiciones, expresiones artísticas, apreciaciones estéticas, sensibilidad poética, motivaciones, inconformidades, grados de disidencia, de rebeldía, de deseos sustentados en la pasión y la razón.

Es necesario informarnos para defender en lo que creemos, descartar de una vez la indiferencia que hemos dicho y ejemplificado hasta sus últimas consecuencias. No seguir manteniendo contacto con lo inerte, con lo hueco, con lo inmóvil, con lo inhabitado. Expresar que aún nos intriga la pasión de conocer y el delirio de esperar.

Creemos en la calidad literaria y la claridad intelectual, en la libertad política y la democracia, en la justicia, la igualdad, creemos fervientemente en la defensa de los derechos humanos y en la lucha contra el prejuicio y contra los autoritarismos de derecha e izquierda. Es sobre éstos valores que fincaremos mes a mes nuestro proyecto.

En Boruca ejerceremos la crítica (y la autocrítica) cultural, literaria y política sin complacencias: fundamentada, imaginativa y razonada. Ésta revista no es en el fondo más que una conversación. Hoy comienza la nuestra contigo. Pero una conversación no es un monólogo. Para que éstas letras y éstas ideas vivan, crezcan e iluminen te necesitamos a tí. Para que se convierta en una verdadera boruca. Vivir el hoy, pero nunca saciarnos del ayer.


Esperamos tus colaboraciones o reflexiones.
No olvides tu nombre, licenciatura, plantel y universidad.
Buzón electrónico: boruca_revista@yahoo.com.mx

Sólo te llevo en el desierto


Por Gustavo Armando Santos Álvarez*


Sólo te llevo en el desierto, entre los silbidos llenos de tu dulce matiz rodeándome de desvelos. Así clavas las uñas formando circunferencias, confiándome en las barricas de caoba de tus ojos. De perpetuidades en sus roses con tu piel de durazno, la cual mis labios pelan y humedecen, ahí es donde me siento seguro, cuando tu aliento llega a mi oreja, cuando tus brazos rodean mi cuello, donde imagino ese hermoso holograma distante, no estas, solo esta tu fotografía.

De esta maldita impotencia que percibo mientras la vida se me va y el corazón se desmorona, temeroso estoy del día en que me vaya. El costo de mis impulsos me deja aquí con mi sufrimiento. Haciendo temblar el espacio cuando apareces acompañada en la cama sonriente y tentativa, ¡Hay Fátima si supieras! Las sorpresas y emociones que dejo guardadas y a veces congeladas, porque me niego a dejarlas desaparecer, de sentirlas, en este universo estúpido en el que a veces dejo la puerta abierta.


*Alumno egresado de la licenciatura en Comunicación.

viernes, 2 de junio de 2006

Tierra de guerreros





Por José Víctor Rodríguez Nájera*


Es una lástima que el presidente de la República (y sus asesores) aún no haya terminado de entender que tiene la oportunidad de pasar a la historia como un hombre ejemplar y un mandatario digno, a tan solo 180 días para entregar el cargo a su relevo.

Basta recordar el peso del poder que dejó caer hacia los pobladores de Atenco. La brutalidad que la que los policías estatales y municipales (operados y manipulados por agentes federales) dejaron ir en contra de los líderes de movimientos sociales y en sí, contra su población civil.

De este hecho de desprenden los abusos sexuales que los guardianes del orden presuntamente cometieron contra algunas de las mujeres que fueron detenidas en estos hechos. O el caso de extranjeros que se encontraron y detuvieron en el lugar, por el hecho de intentar observar los atropellos ante grabadoras o cámaras para ocuparlas más tarde en proyectos de divulgación científica, incluso ante el mismo gobierno federal.

O el caso de obreros mineros que protestaban en el estado de Michoacán por la imposición de un líder sindical de parte de las autoridades de la Secretaría del Trabajo, concretamente del gobierno Federal y que terminó en una gran batalla entre los manifestantes y policías federales.

Ambos casos evidencian la falta de tacto y preparación de nuestras autoridades policíacas, pero también, un nivel de autoritarismo extremo, como los que vivió la población universitaria mexicana en 1968, es decir, un “te callas, te aguantas y te chingas”, máxime cuando en los sucesos recientes perdieron la vida cuatro personas.

Compañero universitario, será posible que los dos ejemplos casos ejemplifiquen un gobierno autoritario, concretamente con rasgos fascistas. Habrá que recordar que en la Segunda Guerra Mundial quienes recibieron este tipo de sometimientos fue el pueblo Judío.

No pretendo describir que ante situaciones difíciles el Estado intente mediar con flores, sin embargo, hay que tener prudencia contra la población, debido a que las familias que perdieron a un familiar no lo podrán recuperar, incluso para aquellos que recibieron con mayor brutalidad golpes (entre ellos un compañero estudiante de la UNAM y habitante de Atenco y que permanece en estado de coma).

Entiendo que estos rasgos fascistas se mezclan con la evidente sociedad secreta del Yunque, que intenta, erróneamente y a toda costa, eliminar brotes de manifestaciones sociales, como sea, con tal de mirar a la elección federal del próximo mes, con el objetivo preciso de posicionar a Felipe Calderón como la única alternativa posible de la supuesta continuidad del "gobierno del cambio".

Empero, la sociedad intelectual repudia éstos hechos, y más, estas expresiones agresivas en pleno siglo XXI. De qué serviría acudir a la Universidad Nacional Autónoma de México si dejamos pasar actos tan cobardes como a los que me refiero. !No pasarán..! diría José Emilio Pacheco.

Señor Vicente Fox, dejaste pasar la oportunidad de mostrarle al mundo, pero principalmente al pueblo mexicano, el ancho de la sociedad, la prole, el pueblo, la banda, el barrio, que pudiste pasar a la historia como un presidente ejemplar. Pero no, pasarás irremediablemente como un presidente inculto, inútil, mentiroso, represor, oportunista y traidor a los intereses del pueblo de México, el mismo que fue engañado a través de la imágen, una falsa y triste imágen de la realidad.


*Alumno de la licenciatura en Comunicación.

Una mujer


Eme aquí señor, viviendo como hombre,

Siendo tan ruda y hostil como suelen ser ellos,

No me han dejado otra salida, más que la de fingir,

Sí, fingir ser hombre, siendo toda una mujer.

Han disparado palabras con abuso de confianza,

Han ultrajado mi nombre por no tener la suficiente calma,

Han tratado de menospreciarme por quedarme callada,

Han ido y venido por la ruta como gatos a obscuras.

Tengo dos manos, dos piernas y un par que adoran,

Tengo un estilo, una imagen y una mirada que añoran,

Tengo la fuerza, el temple y la seguridad que ignoran,

Y tengo desde luego la inteligencia que a muchos exhorta.

Puedo ser cruel cuando me plazca,

Puedo ser hembra cuando la sangre me falta,

Puedo ser tierna y sensible cuando lo necesitas,

Y puedo ser quien tú quieras, siempre y cuando me creas.

Soy mujer porque la suerte estuvo de mi lado,

Soy mujer porque solo yo debo tener ese encanto,

Soy mujer porque un hombre no soportaría el cargo,

Y soy mujer porque valgo más que cualquier tesoro preciado.

Niégalo y dime que no soportas mi engaño,

Niégalo y dime que nunca te he importado,

Niégalo y dime que nunca me has abandonado,

Niégalo y dime cuantas veces te he fallado.

Hombre te dices por tu rudeza y cautela,

Hombre te llaman por tu circunstancial fuerza,

Hombre te gritan porque te temen y mientes,

Hombre te dices libre, pero no has dejado de quererme.

Me dices mujer porque lloro sin pena,

Me dices mujer, cuando deseas más de lo que esperas,

Me dices mujer, para, no obtendrás tus metas,

Me dices mujer, porque no sabes si te responderé.

Y soy mujer ante ti,

Y soy mujer atrás de ti,

Y soy mujer a lado de ti,

Y soy más hombre que mujer.

Los pilares del encierro







Cerbero, fiera cruel y monstruosa, ladra con sus tres fauces de perro contra los condenados que están allí sumergidos. Tiene los ojos rojos, los pelos negros y cerdosos, el vientre ancho y las patas guarnecidas de uñas que clava en los espíritus, les desgarra la piel y los descuartiza. La lluvia los hace aullar como perros; los miserables condenados forman entre sí una muralla con sus costados y se revuelven sin cesar.

(Dante Alighieri. La Divina Comedia. Infierno, Canto VI)


Por Renato Ortíz*


Cerbero toma forma a partir de tejidos y órganos como los siguientes: “Dinero”, “deber ser”, “miedo”, “religión”, Principales estructuras presentes en la lógica de la vida en el encierro.

El dinero estructura, instituye ciertos modos de subjetividad, incidiendo directamente sobre el cuerpo del sujeto de la práctica de la reclusión, ya sea en su nutrición, donde la diferencia de percepción económica hará que existan jerarquías entre los internos, la cantidad de dinero permitirá a unos ejercer su vida sexual de un modo más satisfactorio que otros, entonces el dinero incide en la intimidad, en lo cotidiano.

Pagar uno o dos pesos para “la lista”, para los custodios, pagar protección, “chambear para poder comer algo mejor, aunque sean sólo huevos”, dormir acostado también tiene un costo. El dinero es el factor que circula creando necesidades, y desde estas necesidades actuará el poder como tecnología que regulará la conducta, modificará la subjetividad y hará a los sujetos resignificar su vivencia cotidiana con el valor del dinero, resignificarán el trabajo que producen con el esfuerzo de sus cuerpos en el cautiverio, habrá un intercambio constante para resguardar al cuerpo de los embates continuos del hambre, de la seguridad momentánea, posibilitar la comunicación con la familia y muchas otras necesidades que origina una institución como esta.

Es necesario observar la institución de reclusión, para comprender que estas relaciones existen de una manera totalizante a través de los muros, las celdas, la vigilancia, no sólo de los custodios, sino también de una vigilancia que se ejerce de uno a otro, a la espera del descuido para obtener algún beneficio económico, ampliando el concepto de económico al campo libidinal, desde las pulsiones de conservación, siempre vividas desde la mirada asechante de la muerte. El sometimiento actúa desde la aparición de la violencia ejercida desde y por la institución de reclusión.

La normatividad interna construye un “deber ser” del sujeto que se encuentra recluido, hay reglas que no deben romperse, no deben transgredirse, o se pagará con el precio de otro castigo, castigo que ahora proviene del grupo, castigo que incidirá sobre el cuerpo del sujeto que ha hablado de más (la borrega), y ¿con quien ha hablado de más?, con un representante de la autoridad.

Ante estos acontecimientos que conforman el vivir cotidiano, surge un emergente: el miedo como operador y como tecnología para producir sujetos del sometimiento, funcionales al sistema penitenciario, actuando desde el mandato de sobrevivir. Pero miedo ¿a qué?, al sufrimiento, al hambre, a la realidad violenta, al destierro del grupo a otro lugar: la soledad aparejada con la muerte, o la muerte misma en una punta (Instrumento punzo-cortante) entre el asaltante y su víctima.

Por otro lado, la religión y las prácticas derivadas de esta vieja institución, dotan a los sujetos de apoyos imaginarios que servirán para protegerse de la violencia cotidiana en cautiverio. El miedo, el trabajo, la muerte, el abismo, son dotados de sentido a partir de prácticas y creencias religiosas o supersticiosas.


*Alumno egresado de la licenciatura en Psicología de la UAM-Xochimilco


Ley Televisa


Ley federal de Radio Y Televisión y de Telecomunicaciones, (Peyorativamente) llamada “Ley Televisa”.


Por Javier Valero*


Esta es una síntesis de La Ley de Radio y Televisión y de Telecomunicaciones, haciendo hincapié de que no es todo y la información sobre la ley se sigue generando, debe ser del interés de comunicólogos, sociólogos, abogados, politólogos, historiadores, filósofos y aquellos que se vean perjudicados y agredidos por las decisiones de los diputados y senadores que elegimos y ahora sólo aplican leyes a favor de ellos y las televisoras líderes en nuestro país.

Esto es un llamado a que todo aquel que en verdad sienta que es universitario lo demuestre, informándose de los problemas que aquejan a nuestro país y, así, actúen en consecuencia de la información que obtengan. Les recuerdo a los lectores de este articulo, que ésta información que leerán, no la encontrarán ni en la televisión, ni en Radio y sólo algunos periódicos y revistas le ceden algún espacio, lo más importante es que compañero “Universitario, analices y critiques también tus fuentes de consulta” ya que la información sufre una manipulación que al final pierde credibilidad. ¡Si la información no llega, búscala!

Antecedentes: ¿Por qué no cambio la Ley de Radio y televisión en 46 años?

Tal como ahora, la Ley fue elaborada en 1960 por los empresarios de la televisión y desde 1980 a la fecha, diversas instancias han intentado cambiarla, encontrándose con la oposición férrea de los empresarios que se han opuesto y presionado al gobierno Federal para que no se hicieran modificaciones.

Los artículos constitucionales 6º y 7º que hablan sobre la libertad de expresión y el derecho a la información han sido objeto de movilización social, pugnando por leyes reglamentarias que garanticen plenamente el ejercicio de estos derechos. En 1980 hubo intentos en la Cámara de Diputados por cambiar la Ley de Radio y Televisión, y en 1997 se propuso una ley de comunicación social a la que se conoció como " Ley Mordaza", en ambos casos, los medios comerciales se opusieron y presionaron para evitarla.

En el 2001 más de mil 200 organizaciones pidieron al presidente Vicente Fox cambiar la ley, por lo que en el 2001 se instaló la Mesa de Diálogo para la Reforma Integral de los Medios de Comunicación en la que durante ocho meses, participaron organizaciones sociales, partidos políticos, legisladores, medios comerciales, medios de Estado y gobierno, no obstante, el presidente Fox haciendo caso omiso de este intenso proceso de diálogo, acordó de manera bilateral con los dueños privados de los medios, cambiar sólo el reglamento de la Ley a través de un decreto el llamado "decretazo" a través del cuál, redujo los tiempos que tienen que pagar los medios privados al Estado mexicano por explotar un bien de la nación como lo es el espectro radioeléctrico.

¿Por qué se le conoce como “Ley Televisa”?

Porque Javier Tejado Dondé, abogado de Televisa, es el autor y operador de la recientemente aprobada Ley de Radio y Televisión. Es conocido que Tejado Dondé impulsó esta Ley para su aprobación junto con su ex trabajador Javier Orozco (diputado por el partido verde ecologista y presidente de la Comisión de Radio Televisión y Cinematografía en la Cámara de Diputados).


El problema

Desde 2002 cuando se dio el “decretazo”, las organizaciones sociales entregaron al Senado una propuesta de Reforma Integral de la Ley. Durante dos años se trabajo en el Senado para tener una Ley sobre esa propuesta, la cual siempre fue parada por los Senadores y finalmente congelada por presiones de los cabilderos a favor de Televisa.

Repentinamente, la Cámara de Diputados el --1º de diciembre-- aprobó la propuesta reforma a la Ley de Radio y Televisión y la Ley de Telecomunicaciones para incluir el tema de nuevas tecnologías. Los diputados la aprobaron en siete minutos, ahora confirman que ni siquiera la leyeron. Lo cierto es que, se filtró a la prensa que hubo una negociación con los principales candidatos a la Presidencia de la Republica para que aprobarán la Ley a cambio de que Televisa diera mejores tarifas y cobertura a sus campañas.

El mismo diciembre de 2005 hubo intentos de los Senadores para aprobarla la Ley, pero el gran rechazo público los obligó a detenerse y abrir un periodo de consultas, ante la presión de muchas instituciones, organizaciones, medios de comunicación y especialistas en el tema. Así, en febrero de 2006, al inicio del periodo de sesiones, llamaron a 56 organizaciones, instituciones y expertos a ofrecer su opinión; de los convocados sólo 12 directamente ligados a Televisa defendieron la minuta.

Se publicaron desplegados en la prensa en contra de la Ley. Los principales columnistas de periódicos externaron su opinión, también en contra, incluso los Senadores aceptaron que la Ley estaba mal y justificaron su posición a favor, argumentando que “es mejor que la que tenemos”.

El 21 de marzo, de manera sorpresiva la Comisión de Comunicaciones y Transportes se reunió para aprobar la Ley en lo que se esperaba como un “albazo”, sin embargo, la presión de los medios públicos, comunitarios, organizaciones sociales y sindicales que nos manifestamos fuera de sus oficinas, les obligó a suspender la reunión.

Trascendió que Josefina Vázquez Mota habló con Felipe Calderón sobre la necesidad de aprobar la Ley para “remontar” la campaña por lo que el presidente del PAN dio línea a todos los senadores para que aprobaran la Ley y de esta manera unirse a la negociación que ya había hecho Roberto Madrazo en el mismo sentido. No obstante, algunos senadores del PAN y del PRI decidieron estar en contra de la línea de sus partidos.

Como nunca antes en nuestro país, el día de la aprobación del dictamen, (28 de marzo) medios públicos y comunitarios, sindicatos, organizaciones sociales, ciudadanos, universitarios y líderes de opinión, hicieron una concentración fuera del recinto legislativo para exigir a los Senadores que no aprobaran la minuta de la Ley. Después de seis horas de discusión, 81 senadores votaron a favor de la Ley, 40 en contra y 4 su abstuvieron.

Llamó la atención que sólo ocho Senadores subieron a la tribuna para defender la Ley y los demás, sólo alzaron la mano para cumplir la línea de sus partidos.

Finalmente, queda claro que ganó el poder fáctico de Televisa, con la promesa que hicieran al PRI Y PAN de levantar sus campañas. Se evidenció de inmediato este hecho cuando solo un día después de aprobada la ley de Radio y Televisión, Televisa difundía que López Obrador ya había perdido dos puntos frente a Felipe Calderón.

Las fallas de la Ley aprobada

No reconoce a los medios públicos, ni a los comunitarios, ni les da oportunidades de financiamiento, por lo que no tendrán recursos para la convergencia tecnológica, que es millonaria, y los condena a desaparecer en unos años; dejando sin servicio a comunidades indígenas, campesinas y urbanas marginales. Desparecería todos los medios educativos y de uso social. Se contraviene el artículo 2º constitucional que dice: “que los pueblos indígenas tienen derecho a operar sus propios medios de comunicación”.

No obliga a los medios privados concesionados a pagar al Estado dinero por explotar un bien de la nación con el uso de las nuevas frecuencias por cambio tecnológico, con ello el Estado estará regalando cerca de 70 mil millones de dólares a Televisa y TV Azteca.

La ley actual dice la que la radiodifusión es de interés público, la Ley aprobada olvida esta definición y sólo la deja como transmisión de señales, con ello se omite toda la función social de los medios.

El principal criterio de la licitación es la subasta ascendente, esto es darle la frecuencia al mejor postor, y esos serán sólo los grupos económicos más poderosos, por ello favorece los monopolios, contraviniendo el artículo 28 de nuestra constitución que prohíbe los monopolios. La Comisión Interamericana de Derechos Humanos ha dicho que os monopolios en medios de comunicación atentan contra la democracia, porque solo ofrecen una oferta de información y niega el derecho a la información.

Propone un supuesto órgano regulador que será “autónomo”, pero no es cierto pues no le da facultades para operar, y además, no pone ningún candado para que los que vayan a ser comisionados no estén directamente trabajando en los medios privados o en otras áreas directamente relacionadas, con ello le quita la rectoría al Estado sobre un bien nacional contraviniendo el artículo 27 constitucional que dice: que “el espectro es un bien nacional”. Estos comisionados podrán estar hasta por 16 años en el puesto, así que ahora Televisa pude asegurar a su gente ahí presidente tras presidente, sin que pueda meter las manos.

La Cofeco, el IFE, la Cofetel, la CDI reconocen que esta Ley fomenta el monopolio y que omite la función social de los medios además de no tomar en cuenta ninguna de sus observaciones.

Por ultimo, el jueves 4 de mayo, los Senadores entregaron la acción de inconstitucionalidad a la Suprema Corte de Justicia. Esta fue la ultima acción que se puede hacer para echar abajo esta Ley, ahora, tenemos que soportar la telé-basura de las empresas Televisa y TV Azteca por lo menos durante 16 años, esto significaría un retroceso a la libre expresión, a la educación, a la cultura y todas las repercusiones que puede tener el hecho de crecer con unos medios manipulados por los dupolios televisivos de la mano del próximo presidente de México sea quien sea.


Partir del Tercio


Por Everest Landa*


Hay que pasar una gran tienda, cruzar una avenida, unos cuantos pasos más, doblar la esquina y allí está.

La recepción es discreta, misteriosamente sucia, una cortina que separa al “Tercio” del exterior, es de un negro desértico. En cuanto es abierta, se desparraman el vocerío y el riserío; entonces las vampirescas miradas se lanzan como estacas; por un instante.

Se tiene que buscar un lugar sobre las vigas o el cemento que hacen de bancas. Uno de los visitantes hará la vaca que muge por cebada y la pedirá en la puerta que da al interior de la casa de “La doña”, la patrona. Llegadas las caguamas empieza a vivirse el “Tercio”.

La conversación caerá como el líquido ámbar-burbujearte por la garganta o el ámbar-cálido por el mingitorio aislado de la “sala de estar” por otra cortina, aunque ésta destaca por indiscreta. Parece que no hay música, pero se reviven melodías a ratos y cada grupo tiene su propia música, su propio ritmo. Aún así, hay como un oleaje entre todos los gritos, un vaivén ronco y una cresta aguda de alguna mujer a la que se le ha chorreado la cerveza sobre el pantalón.

Como en cualquier tugurio, el serio deja de serlo; el alegre hace show. Los camaradas ríen, alegan, se mofan de todos, de todo, de sí. En ese punto es donde el “Tercio” es distinto a muchos de su especie, es un verdadero centro de disertación filosófica-existencial-alcohólica. Andan en boca Platón y Marx, Cortázar y el tiempo, el chisme de la semana y un desamor, las clases de la FES y el futuro, la cerveza y la cerveza.

Lleva ese nombre desde tiempos legendarios, resulta de una construcción popular, una deformación del término Tercer mundo. Porque el “Tercio” es el tercer mundo en un cuarto de siete por siete, es sombrío y cálido, triste como gaviota, azaroso como truhán en callejón, licencioso como señorita; grita para dentro, hacia el estómago; se llora con las manos en la cara; se lamenta y enorgullece de no ser otro; aloja a todos por igual; en gran medida es una gran puta.

Pero también es puerto. Las mercancías, como los viajeros, tienen que llegar a él para cruzar el mar. Los viajeros que van “Tercio” han de partir lejos, tienen que ir hasta allí para izar las velas de la charla, dejar que el viento amargo de una Indio o Viky los lleven allende la tristeza, virar una y otra vez entre tanto amigo, sentir la brisa de una tormenta que nunca llega, mirar por el astrolabio los recuerdos jugosos como naranjas, navegar y navegar y navegar y navegar. Luego, entre sus piernas de miseria vendrá el naufragio.

*Alumno egresado de la licenciatura en Comunicación.

FES Acatlán/UNAM

everest_landa@yahoo.com.mx